Va de series...

Todavía no había subido ninguna entrada sobre series de televisión en esta nueva andadura del blog. Y es que como las temporadas terminan, en Estados Unidos, en mayo, solía ser entonces cuando comentaba qué me había parecido cada una. Pero puede que éste sea un buen momento para comentar mis opiniones sobre las series que estoy siguiendo a ritmo de emisión americano. El año pasado nos quedamos sin dos referentes fundamentales, Lost y 24 (lo mismo creí que había ocurrido con Damages, aunque parece ser que ha sido adquirida por una nueva cadena y que podríamos tener nuevas temporadas), pero siempre hay motivos para estar pegados a la pequeña pantalla. Éstas son las que estoy siguiendo ahora, y éstas son mis impresiones...
FRINGE (3ª temporada)

Un divertimento mayúsculo. Fringe se ha mantenido desde su inicio como un magnífico serial fantástico, una golosina plagada de referencias a la cultura popular, que, sin embargo, siempre ha estado amenazada de cancelación por su audiencia, no siempre todo lo jugosa que la cadena hubiese deseado. De hecho, a partir de 2011 ha sido relegada a los viernes, aspecto que hizo teblar a los seguidores. Con todo, parece que el público es fiel, y que aunque no arrastra a una masa enfervorizada, sí logra mantenernos a quienes la seguimos desde el principio.

Esta tercera temporada está siendo espectacular, manteniendo la emoción del final de la segunda, con esos dos mundos, dos realidades paralelas, dos Olivias, dos Walters y multitud de sorpresas. Cada episodio de Fringe es un viaje a un mundo alucinante, en el que ciencia y fantasía van de la mano, alcanzando cotas de entretenimiento inigualables. Seguimos contando con personajes magníficos, capaces de mantener el interés aunque las tramas, sobre todo las que no guardan relación con la historia principal, no sean siempre destacables. Pero seguimos avanzando, seguimos descubriendo cosas, y seguimos disfrutando. No puedo descartar que Fringe sea, cuando termine, mi serie favorita de siempre...

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CÓMO CONOCÍ A VUESTRA MADRE (6ª temporada)

La decepción hasta el momento. Cada temporada nueva de How I meet your mother ha sido peor que la anterior, aunque es cierto que siempre ha habido capítulos legendarios...Pero la frescura de aquellas dos primeras temporadas, y las carcajadas que provocaban se están perdiendo a velocidad de vértigo. Está ocurriendo lo que ya nos temíamos: la trama se alarga, se estira como un chicle, y cada vez nos importa menos quién es la madre de los hijos de Ted. Pero el hecho de que se trate de una sitcom de capítulos de sólo 20 minutos de duración hace que se pueda seguir sin agobios. Barney sigue siendo un personaje increíble, Robin sigue cautivando con su personalidad y belleza, pero Marshall, Lily y Ted no despegan...Han introducido a Zoey, interpretada por Jennifer Morrison, y sigue habiendo cameos estelares. Pero necesita volver a los guiones desternillantes del principio, y la trama principal debe de seguir siendo eso, principal.

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THE BIG BANG THÉORY (4ª temporada)

Otra serie que ha ido de más a menos, aunque no tanto como la anterior. Sigue siendo la sitcom, creo, más hilarante, la que a mi al menos me hace pasar mejores momentos. Ya no es el despiporre de las dos primeras temporadas, o incluso de la tercera, que aunque bajó algo el nivel también era potente. La cuarta empezó con ese personaje encarnado por Mayim Bialik (Blossom), la supuesta novia de Sheldon, que después resultó no serlo o...sí. Los cerebritos y Penny siguehn haciéndome reír, algo menos, pero se les perdona. Siguen hablando de cómics, de cine (espectacular el episodio homenajeando a En busca del arca perdida), videojuegos y demás cosas interesantes. Sheldon sigue marcando el ritmo, aunque mi favorito es Howard, uno de los personajes más increíbles de la historia de la tele. Con Friends, mi sitcom favorita de siempre.

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V (2ª temporada)

En cambio, V sí ha mejorado. La primera temporada supuso para mi una decepción tremanda, teniendo en cuenta que actualizaba (o eso pretendía) aquella maravilla ochentera que a todos los de mi generación marcó. Los doce primeros episodios de aquella primera entrega resultaron aburridos, sosos, carentes del interés que se le suponía a una historia de invasión extraterretres, cuyos visitantes escondían su auténtica realidad reptil bajo apariencia humana. Apenas se les vio, no hubo ratones engullidos, ni lagartos, ni una trama mínimamente interesante. Por no tener, no tenía ni personajes carismáticos. Pero la cosa ha cambiado. Parece que le han visto las orejas al lobo y han vuelto a lo que todos queríamos. Les hemos conocido por dentro, con abundancia, por supuesto, de CGI, y hemos asistido al retorno de un mito:

Volvió Jane Badler, volvió Diana. Aquel personaje que se llevó casi todo el misticismo de la primera V aparece ahora como madre de Anna, la nueva líder de los visitantes. Fue una aparición, hay que reconocerlo, genial, que sirvió para que el interés de la nueva serie se incrementase. A su presencia hay que añadir más acción, más bichos, más crueldad por parte de los mismos y, en definitiva, más interés y diversión. De hecho, terminé de ver la primera temporada con bastante menos ganas de las que tengo ahora viendo la segunda. Los guiones no son precisamente destacables, pero, admitámoslo, tampoco lo eran en los 80.


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Y, por supuesto, me estoy poniendo al día con series que no había podido ver, entre ellas maravillas como El Ala Oeste de la Casablanca (que estoy a punto de terminar) o Mad Men. Y es que la tele está viviendo una época de esplendor que hace que echemos de menos días de 28 ó 30 horas...Seguiremos informando.

El blog se toma unos días de descanso, que su responsable no puede con todo...Volveré el lunes 21, con más cine, con las últimas opiniones de las pelis nominadas al Óscar y alguna cosa más.

Mientras tanto, nos vemos en el cine...